¿Sabías que lo que comes puede influir en la calidad de tu sueño?
Y a su vez, dormir bien tiene un impacto directo en tu apetito y tus elecciones alimenticias. Estas dos piezas del rompecabezas de la salud están profundamente conectadas y juntas pueden transformar tu bienestar.
- La dieta mejora el descanso: Alimentos ricos en triptófano, como el plátano, los lácteos y los frutos secos, favorecen la producción de serotonina y melatonina, hormonas clave para un buen sueño. Evita cenas pesadas y estimulantes como el café o el chocolate en las horas previas a dormir.
- Dormir regula el apetito: Un descanso adecuado ayuda a mantener equilibradas las hormonas del hambre, como la leptina y la grelina. Cuando duermes poco, es más probable que sientas antojos de alimentos altos en azúcares y grasas.
- Rutinas saludables: Establece horarios regulares para tus comidas y horas de sueño. Una rutina constante ayuda a tu cuerpo a optimizar su funcionamiento.
- Hidrátate adecuadamente: La deshidratación puede interrumpir tu descanso, así que asegúrate de beber suficiente agua durante el día, pero evita grandes cantidades justo antes de acostarte.
En Punto Express promovemos un enfoque integral para la salud.
Una dieta balanceada y un sueño reparador son la base de una vida saludable.
Dedica tiempo a cuidarte,
¡tu cuerpo lo agradecerá!
